martes, 12 de octubre de 2010

Hoy

Hoy jugué a las espadas con un extraño en la calle mientras blandía mi sombrilla en el aire.
Hoy me imaginé cómo sería una de mis amigas desnuda.
Hoy no paré bolas mientras alguien me contaba la historia de su vida.
Hoy me salí de clase cuando el profesor estaba contando una de sus anécdotas.
Hoy saqué obras de teatro para saber más que usted.
Hoy intenté mirar qué tan grande era el miembro de mi vecino de necesidades y fracasé.
Hoy sucumbí ante las ganas de mandar un mensaje que probablemente no debí haber mandado.
Hoy no contesté una llamada que sabía que era importante.
Hoy le pegué con mi sombrilla a un motociclista que iba por un andén.

No sé si fue la sombrilla, pero a veces caminaba cojo como House con mis libros bajo el brazo sintiéndome mejor que el resto porque la música con acordeón que oigo no es vallenato y no se la frotan los vergajos de hoy en día. Hoy caminaba por las calles de París rodeado de cafeterías, bicicletas viejas y palomas en vez de las sucias y destartaladas calles de la universidad donde me ofrecen sandu-ches. Hoy fui todo un dandi, me pudo el bohemio y hablé con Baudelaire.

Hoy fue un buen día.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Se murieron los románticos


- “Creo que lo mejor es que dejemos de vernos cdt.”
 Todavía me cuesta entender cómo carajos alguien puede terminar una relación larga con un mensaje de texto o por messenger y por eso defiendo a los románticos, a los estúpidos que todavía escribimos cartas, a los poetas frustrados, a los que escriben canciones y a los que escriben cuentos en un cuaderno con un lápiz Mirado 2.
Acuso a la tecnología de matar el espíritu romántico que quedaba en algunos de esos conquistadores retro y cursis. Hoy seré el abogado de los nice guys que devotamente se inventan nuevas formas de hacer maricadas tiernas para quedar bien, como mi mejor amigo que se tomó la molestia de escribir TE AMO con tarritos de Alpinito o esos que se ponen a hacer carteleras gigantes y hacer el oso por la calle con tal de sacarle una sonrisa medio embarazosa a la persona en cuestión.
Todos ustedes enamoradizos romanticones, no sean cobardes y hagan el ridículo que todavía podemos rescatar lo que hicieron nuestros bisabuelos para conquistar a nuestras bisabuelas cuando no habían celulares ni computadores. Al resto de los simplones: sigan mandando pokes y dejando walls por Facebook.
Elromanticismoesnocivoparalasalud 
Nota: No siempre les va a funcionar y en tal caso fuck them and laugh (no literalmente).

Y comienza la era del terror


Un profesor hace poco me dijo que si uno no escribía, no existía; así que para existir supongo que he de escribir así sea en un Blog. Además, si todavía vivimos luego del 2012 tendré un registro de todas las bobadas que pienso en este momento. 
A mis posibles lectores, les advierto mi abuso casi sexual y obsesivo del lenguaje; lo siento, soy adicto. Ah, y no esperen mucho, no me gusta escribir bonito.
Hoy comienzo a hacer listas negras y declaraciones incendiarias. Llámenme Marat, tengo las puertas abiertas y cualquiera puede entrar a matarme.